'Amor, mentiras y sangre' y más películas LGBTQ con mucho estilo

‘Amor, mentiras y sangre’ y más películas LGBTQ con mucho estilo

La aclamada Amor, mentiras y sangre (Love Lies Bleeding) es uno de los estrenos destacados del mes en la cartelera del Film Club Café, y te adelantamos algo: no verás una película similar este año. Dirigida por la cineasta Rose Glass, se trata de una de las películas LGBTQ más singulares en años recientes, con un estilo visual que explota y hace lucir su mezcla de géneros, que van desde el thriller criminal hasta el terror y la fantasía.

Cabe decir que es mucho más que una historia sobre un romance condenado por el crimen y la ambición. Una vez que se sale de control, se permite abrazar su lado más fantasioso, visceral y extraño, con resultados que le hablan tanto a la mente como a los sentidos.

Y lo dicho, no hay muchas películas LGBTQ similares, pero seguramente querrás ver otras que, como Amor, mentiras y sangre, tengan mucho “estilo”. Es decir: una puesta en escena, con utilizaciones únicas de la fotografía, montaje y sonido para crear un lenguaje con cierto grado de artificio.

Recuerda que, si tienes tu membresía de Film Club Café, podrás rentar varias de ellas en DVD en nuestra videoteca.

PELÍCULAS LGBTQ CON ESTILOS VISUALES DISTINTIVOS

AMOR, MENTIRAS Y SANGRE (2024)

Con Salvando almas (Saint Maud), la directora Rose Glass ya había mostrado una afinidad para crear historias que mezclan elementos como una sutil ironía en un terror psicológico que satiriza el fanatismo religioso. No iba a tener problema para hacer algo todavía más imaginativo con una historia sobre una empleada de gimnasio (Kristen Stewart) y una fisicoculturista (Katy O’Brian) que se enamoran pero son arrastradas a un mundo de violencia criminal durante los 80.

Desde que Glass decide comenzar Amor, mentiras y sangre mirando hacia las estrellas, da la sensación de que éste no es el típico thriller criminal. Tanto la sexualidad queer de sus protagonistas como la violencia de su mundo son expresadas con una visceralidad palpable, antes de entregarse por completo a los terrenos del horror corporal y de la fantasía como alegorías de la ambición, del amor y, a final de cuentas, una trágica dependencia.

Amor, mentiras y sangre (Love Lies Bleeding)
Amor, mentiras y sangre puede llegar a ser deliciosamente extraña (Crédito: Cine Caníbal)

Consulta fechas, horarios y boletos para ver Amor, mentiras y sangre en el Film

HAPPY TOGETHER (1997)

En lo que se refiere a estilos visuales únicos en el cine, no podemos dejar de mencionar al hongkonés Wong Kar-wai, director de películas distinguidas, entre otras cosas, por su cadencia melancólica, como Deseando amar y Chungking Express.

El cineasta también tiene un clásico entre las películas LGBTQ: Happy Together. La película, ganadora de Mejor director en Cannes, sigue a una pareja gay (Tony Leung y Leslie Cheung) en una tormentosa relación, que se complica todavía más durante un viaje juntos a Argentina.

Visual y auditivamente, la narración de Wong Kar-wai evoca la melancolía y el pesar interior de los protagonistas, que añoran conexión sin poder encontrarla entre sí. Lo que el director logra con la distensión del tiempo, en combinación con los tangos de Astor Piazzolla, sólo se compara con lo que vendría después en Deseando amar.

LUZ DE LUNA (2016)

La ganadora del Oscar a Mejor película de 2017 es un clásico moderno del cine LGBTQ. Luz de luna (Moonlight) cuenta la historia de Chirone a través de tres etapas de su vida: una infancia de abusos (Alex R. Hibbert), una adolescencia violenta y llena de inseguridad (Ashton Sanders) y una adultez de represión emocional y sexual (Trevante Rhodes).

En su segundo largometraje, el director Barry Jenkins utiliza diferentes técnicas de cámara para representar la turbulencia interior de Chirone y, como contrapunto, la seguridad y entereza de su figura paterna, Juan (Mahershala Ali). Inspirado él mismo por Wong Kar-wai, Jenkins también emplea la saturación de color, la cámara lenta y ángulos frontales de cámara para mostrarnos el alma de sus personajes.

TANGERINE (2015)

No se requieren elementos demasiado costosos para crear un estilo visual distintivo, como demuestra la película que puso en el mapa a Sean Baker, el ganador de la Palma de Oro en Cannes 2024 con Anora. Por el contrario: la filmación con celulares iPhone y luz natural permite un lenguaje de cámara dinámico, fluido, con una “suciedad” que sólo alimenta su historia de caos y venganza.

Tangerine: Chicas fabulosas sigue a Sin-Dee (Kitana Kiki Rodriguez), una prostituta trans que, luego de salir de la cárcel, descubre que su novio y proxeneta (James Ransone) la ha estado engañando con una chica cisgénero. En plena víspera de Navidad, Sin-Dee decide emprender una búsqueda por todo Hollywood para encontrar respuestas y retribución, con resultados tan hilarantes como catastróficos.

UNA MUJER FANTÁSTICA (2017)

Una mujer fantástica, la histórica ganadora chilena del Oscar a Mejor película extranjera en 2018, es una de las películas LGBTQ más memorables en años recientes por varios motivos. Entre ellos, un lenguaje que se vale de la distensión del tiempo, la saturación de color y pasajes oníricos para representar la lucha de su protagonista.

Marina (Daniela Vega) es una mujer trans, mesera y cantante de bar que mantiene una relación con Orlando (Francisco Reyes), un hombre bastante mayor que ella. Cuando él muere de una aneurisma rumbo al hospital, la identidad de Marina la convierte objeto de sospechas y prejuicios por parte de la familia de Orlando, quienes la acosan e incluso le prohíben asistir al funeral. El duelo de Marina se convierte, también, en una lucha por la dignidad más básica.

Scroll al inicio